No te tienta?

Tenía una cajita de leche condensada preguntándome qué iba a hacer con ella!

La receta es de Paulampics (Instagram), e hice la mitad porque ella lo sugería.

En una olla se pone manteca, cacao y agua, a derretir. Por otro lado se mezclan los secos. Se forma un huecho en el medio y se agrega leche condensada, huevos, vainilla… Por qué no hay fotos de nada de esto es un misterio (tengo un problema de organización de fotos, por si les interesa saber).

Lo llamativo es que la cantidad que lleva de leche condensada es 1/3 de la lata de 400 gr., a ojo. Esto en la receta completa. Así que en la mía serían unos 70 gramos. No recuerdo cómo los medí. Los habré pesado? O dividí mi caja (que no era lata) en partes hasta obtener un sexto? Vaya uno a saber. Ya sé! Asumí que la caja era una taza e hice las divisiones acordes (inserte emoji alzando los hombros).

Y ustedes estarán esperando mi explicación para esta torta rota acá en la foto… Años horneando, como para no saber que hay que dejar enfriar antes de desmoldar! Pues resulta que supuestamente había que echarle el baño cuando estuviera todavía tibia, y no quería hacerlo en la tortera. Así que obtuve esto:

Para la cobertura se usa el resto de la leche condensada: dos tercios de la caja. Separé un sexto restante (por lo de hacer la mitad de la receta, vio?) y lo usé en otra oportunidad.

Qué más lleva? Cacao y manteca. Y es igual al baño que hago casi siempre para mis tortas! Solo que yo uso dulce de leche, y ni idea de las cantidades. Lo que me lleva a una conclusión que he venido sacando hace tiempo: la leche condensada y el dulce de leche son prácticamente intercambiables.

Y así, sin saber aún cómo solucionar el tema de la cobertura en la torta recién sacada del horno, es que llegamos a esta delicia toda rota.