Había que probar.

Últimamente estoy alerta a las recetas sin azúcar, porque mi madre está intentando evitarla lo más posible.

Así que cuando Paulina Cocina publicó estos brownies (en su cuenta de IG), tuve que probarlos.

Miren qué belleza la mezcla de manteca y cacao:

Por otro lado se baten dos huevos con endulzante. Se sugieren 4 sobrecitos, y yo usé esa cantidad de stevia (marca Tevias). Después agregué otro sobre de Splenda (creo). Hay que batir bastante rato, hasta que espume. Y al batido agregar la mezcla de cacao. La verdad que mi batidora no está para esos trotes. Creo que lo incorporé a cuchara de madera para ayudarla un poco. Eso sí, para la harina del final ni usé la batidora, porque no quiero que se me muera! En la receta original usaba leche para ablandar el proceso, pero yo la omití.

Así que me quedó esta pasta:

La aplasté en una tortera, y no logré llenarla. Arriba le agregué nueces…

que se salieron todas después del horno!

Más allá de eso no parece mal, verdad?

Lo cierto es que quedaron híper amargos.

No sé cuánto endulzante se precisaría para llegar a un dulzor satisfactorio, y dependerá de cada paladar (sobre todo si ya estás acostumbrado a comer sin azúcar). Animo a los amables lectores que prueben y me cuenten (o que me digan si alguna vez probaron algo parecido).

Cuestión es que, al resultar incomibles, hice la única cosa que se podía hacer: convertir los brownies en trufas. Para ser coherente, usé dulce de leche sin azúcar.

Pero como tampoco la pavada, les puse grajeas de colores.

Y saben que igual quedaron amargas las trufas? Yo no sé.